Un par de turistas lograron grabar en vídeo un fascinante fenómeno natural en las montañas cerca de la ciudad rusa de Novorossíisk. Unas nubes bajaban de las montañas a la bahía como si fuera una cascada blanca.
Al subir a la altura de 540 metros sobre el nivel del mar el pasado 4 de diciembre, los jóvenes vieron nubes que fluían hacia la bahía de Tsemés y se disolvían en el aire sin llegar nunca a la ciudad.