El Ojotnik ya había realizado una serie de vuelos en los que se evaluaron sus prestaciones de vuelo y los principales sistemas.
"Desde el aeródromo militar del Centro de Preparación y Aplicación a Combates de la Fuerza Aeroespacial rusa en el polígono de Ashuluk se realizaron varios vuelos del Ojotnik con unas imitaciones funcionales de misiles aire-aire. Tales misiles de combate están diseñados para impactar otras aeronaves", comunicó el interlocutor sobre los recientes ensayos.
El 3 de agosto de 2019 el aparato no tripulado realizó su primer vuelo de más de 20 minutos.
El Ojotnik, desarrollado por la compañía rusa Sukhoi, está dotado del mismo motor turbofan con que se equipa a los míticos cazas Su-27.
En la construcción del vehículo no tripulado se usan materiales especiales que lo hacen casi invisible a los radares.
El avión no tripulado está llamado a convertirse en el primer dron de combate de las Fuerzas Armadas de Rusia.