"La situación económica del país está seriamente herida. Hora que pasa nos informamos de la patética situación en la que vive nuestro Estado Plurinacional. No es solamente reactivación, se trata también de la reconstrucción de la economía", dijo el mandatario tras tomar juramento a su primer gabinete de 16 ministros.
"Este va a ser un Gobierno sumamente austero", afirmó Arce, quien fue ministro de Economía durante la mayor parte del ciclo de bonanza que vivió Bolivia durante los pasados mandatos de Morales (2006-2019).
Señaló que, además de atender los problemas macroeconómicos, pondría atención preferente en las necesidades de los sectores más pobres del país y, en general, de los problemas sociales.
"Estamos viendo hambre, una crisis sanitaria que ha profundizado las estructuras de la pobreza y también tenemos una crisis educativa que merece la atención de todos", apuntó.
Arce agregó que atendería también con urgencia la reorientación de la política internacional del país.
El Gobierno transitorio enfrió las relaciones de Bolivia con Rusia, China e Irán, acercándose en cambio a Washington e Israel, entre otros cambios de línea.