Según informó el medio Dutch News, citando a la decisión judicial, entre los pájaros fallecidos están dos guacamayos jacintos, valorados en unos 40.000 euros, y una amazona nuquigualda, estimada en 1.250.
La indemnización también incluye unos 14.000 euros por perder la posibilidad de vender los pájaros.
La justicia neerlandesa determinó que los loros fallecieron a causa de un estrés sufrido por un ruido que se produjo después de que un globo aerostático, que tomó parte en unas competiciones en marzo de 2017, volara a unos 50 metros de la jaula de los pájaros y encendiera su quemador principal en ese momento.
El piloto del globo afirmó que estaba obligado a encender el quemador para seguir volando.