"Estos cargos son las últimas acusaciones que resultan de una investigación criminal federal de varios años, conducida por el ICE - HSI [Investigaciones de Seguridad Interior]", en el estado de Carolina del Norte (sur), establece la declaración.
Siete de los acusados enfrentan cargos de felonía por mentir en los formularios de voto, mientras que a los doce restantes se les atribuyen delitos por haber sido votantes.
El presidente Donald Trump y otros han afirmado que las elecciones de Estados Unidos están sujetas a fraude a gran escala, suficientemente importante como para alterar el resultado, especialmente por la práctica del voto por correo.