Luego de que varios ministros renunciaran, el primer ministro libanés, Hasán Diab, anunció la dimisión del Gobierno libanés.
Las protestas siguen por cuarto día consecutivo y se vuelven más violentas en cada jornada.
El número de muertos en la explosión que sacudió la ciudad el 4 de agosto supera los 170. Alrededor de 6.000 personas resultaron heridas y casi 300.000 se quedaron sin hogar.