El presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, pronunció este 24 de julio en la antigua basílica Santa Sofía de Estambul el adhan (llamado a la oración), dando comienzo a la primera oración islámica en este templo después de 1934.
Erdogan también declaró que unos 350.000 fieles acudieron este 24 de julio al rezo musulmán en Santa Sofía.
Antes de comenzar la oración, Erdogan leyó Al Fatiha, la primera sura (capítulo) del Corán, la ceremonia pudo verse también en unas grandes pantallas instaladas frente a Ayasofía, nombre turco de Santa Sofía.
"Han acudido unos 350.000 musulmanes, Ayasofía ha recuperado su estatus de mezquita, es un patrimonio cultural de la humanidad y pueden visitarla representantes de todas las religiones", dijo el mandatario turco a la prensa.
El Consejo de Estado de Turquía dictaminó el 10 de julio que el monumento se convertirá de nuevo en un lugar de culto, derogando un decreto de 1934 que hizo de esta joya de la antigüedad un museo.
La histórica Santa Sofía, construida en el año 537 d.C. como catedral cristiana, se convirtió en mezquita cuando los otomanos conquistaron Estambul en 1453. Luego fue despojada de su carácter religioso y en 1935 fue convertida en un museo.
La decisión de reconvertir Santa Sofía en una mezquita provocó fuertes críticas de numerosos países y organismos internacionales.
La Unesco, que se opuso a la medida, publicó una declaración en la que expresa su preocupación por el impacto que podría tener en el valor universal del sitio y pedía a las autoridades turcas "que entablaran un diálogo" sobre el asunto.
Antes de que fuera anunciada la noticia, el patriarca de Moscú y de toda Rusia, Kiril, señaló que los atentados contra el legado espiritual de la Iglesia de Constantinopla provocan amargura e indignación a los creyentes rusos, y que todo lo que amenaza a Santa Sofía representa una amenaza para la civilización cristiana.
El papa Francisco reconoció el pasado 13 de julio que estaba muy dolido por la decisión tomada por Ankara en relación con el templo.