"El COVID-19 dejó claro lo que ya estaba claro: la digitalización no va a esperar... el acceso a internet debe ser reconocido como un nuevo derecho humano", señaló Sassoli en un comunicado.
Según el legislador, muchos niños en ese momento tenían problemas con el acceso a la educación debido a la falta de internet.
"En estos meses de restricciones, más que nunca, millones de personas en Europa y en todo el mundo se han visto obligadas a depender de una conexión a internet para trabajar, estudiar, comprar alimentos y comunicarse con sus seres queridos. Al mismo tiempo por razones geográficas, económicas o sociales la falta del acceso a internet resultó ser la principal razón de la marginalización", subrayó.