"El estado de la niña era extremadamente grave debido a la prematuridad y la infección intrauterina. La niña estuvo en un aparato de ventilación mecánica durante más de un mes y recibió alimentos a través de un tubo durante mucho tiempo", comunicó la jefa del centro Tatiana Shavrak.
Agregó que "gracias a los esfuerzos de los médicos, actualmente su peso ha aumentado más de tres veces y alcanzó los 1.720 gramos".
Ahora la niña está bajo la supervisión continua de especialistas.