"Discutieron nuestra coordinación para responder a los desafíos mundiales urgentes, incluida la decisión unilateral y arbitraria de China de imponer legislación de seguridad nacional en Hong Kong, las actividades desestabilizadoras de Irán en Irak y Medio Oriente y la necesidad de una explicación transparente sobre los orígenes y la respuesta mundial al COVID-19", dijo la portavoz del Departamento de Estado, Morgan Ortagus.
La portavoz dijo que los funcionarios también dialogaron sobre los esfuerzos de coordinación para mantener las cadenas de suministro de equipos de protección personal y otros equipos médicos durante la nueva pandemia de coronavirus.
El Gobierno de Donald Trump ha acusado repetidamente a China de prácticas comerciales desleales, violaciones a los derechos humanos e invasión del estatus especial de Hong Kong.
China niega las acusaciones y ha señalado que EEUU realizó varias violaciones del derecho internacional.
La nueva pandemia de coronavirus ha sido una causa adicional de discordia, ya que Estados Unidos acusó a China de retener información durante las primeras etapas del brote y afirmó tener evidencia de que la pandemia se originó en un laboratorio del país asiático.