"Airbus confirma que acordó con sus socios la aplicación del Plan de retención de empleos del Gobierno para aproximadamente 3.200 empleados de producción y apoyo a la producción en su planta de construcción de aviones comerciales en Broughton", dijo la empresa en un comunicado.
El esquema de retención de empleo del Reino Unido permite a los empleadores despedir al personal y reclamar subsidios en efectivo de hasta el 80% de los salarios, con un límite de 2.500 libras por un empleado.
Según el sindicato británico Unite, la declaración de Airbus debería ser un llamado al Gobierno británico y a la Unión Europea de que las industrias aeronáutica y aeroespacial necesitan un apoyo estatal urgente.
"El apoyo estatal protegerá no solo a los empleados de la industria aeroespacial, sino también a más de 100.000 trabajadores en el Reino Unido que participan en la cadena de suministro de la industria", dijo el sindicato en un comunicado.