En particular, las imágenes fueron captadas sobre la isla de Hart, que se usa comúnmente para los entierros de fallecidos sin familiares o para los que no se pueden permitir un funeral. En las imágenes se puede ver cómo los operarios transportan ataúdes y los colocan en pilas antes de enterrarlos.
Ahora, visto el número de muertes causadas por la propagación del coronavirus, las autoridades se ven obligadas a tomar medidas drásticas.
Así, previamente, los cadáveres se almacenaban en la morgue de la ciudad entre 30 y 60 días a la espera de ser reclamados por los familiares. Solo después eran enterrados en el cementerio de la isla Hart. Ahora, este tramo de tiempo ha sido reducido a tan solo dos semanas para poder lidiar con la afluencia de fallecidos, que están desbordando las capacidades de las morgues de Nueva York. Estas tienen una capacidad para almacenar entre 800 y 900 cadáveres, más otros 4.000 que caben en los camiones refrigeradores que fueron traídos a la ciudad.
De los más de 490.000 casos confirmados en EEUU, más de 170.000 se encuentran en Nueva York, donde casi 8.000 personas ya fallecieron a causa del coronavirus, según los datos de la Universidad Johns Hopkins.