Los militares tenían que calcular y enviar las coordenadas de los enemigos con ayuda del sistema multifuncional Orlan-10 a los puestos de mando. Posteriormente los sistemas de lanzacohetes múltiples Grad y Uragan intentaron aniquilarlos situándose a una distancia de entre 10 y 20 kilómetros.
Durante estas maniobras los soldados libraron combates utilizando la táctica del carrusel de artillería. Requiere que las fuerzas se retiren a una zona en concreto para recargar sus armas y, desde la nueva posición, abrir fuego. Los sistemas de artillería Msta-S protegieron a los soldados rusos mientras que estos ocupaban posiciones.
Aproximadamente 1.500 militares y más de 500 equipos militares participaron en estos ejercicios.