España

El presidente del País Vasco adelanta elecciones para que no coincidan con las catalanas

MADRID (Sputnik) — El presidente del Gobierno autonómico del País Vasco, Íñigo Urkullu, anunció que las elecciones regionales se adelantarán al próximo 5 de abril, cinco meses antes del final previsto para la legislatura, un movimiento con el que busca evitar que los comicios coincidan con los de Cataluña, cuya fecha aún está por determinar.
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"He tomado la decisión de convocar elecciones vascas el próximo 5 de abril", afirmó Urkullu en una comparecencia de prensa ofrecida desde Vitoria.

En las últimas fechas el Gobierno vasco ya dejó entrever su intención de adelantar los comicios.

La semana pasada, después de apuntar a un posible adelanto electoral desde la tribuna del Parlamento Vasco, Urkullu reunió a sus consejeros para consultarlos sobre la posibilidad de avanzar los comicios, un trámite obligatorio antes de oficializar la convocatoria.

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Con el adelanto al 5 de abril, el Lehendakari (presidente vasco) se adelanta a las posibles réplicas que las elecciones catalanas puedan tener en toda la política española, donde además el presidente del Gobierno español, Pedro Sánchez, afronta un incierto proceso de negociación para aprobar los Presupuestos Generales del Estado en el que las fuerzas políticas vascas y catalanas jugarán un papel clave.

"No es solo una cuestión sólo de Cataluña, sino de cómo su situación pudiera afectar al Gobierno español y de rebote al conjunto de las administraciones", dijo Urkullu en su comparecencia.

Además de referirse a esta cuestión, el presidente regional justificó el adelanto electoral asegurando que los partidos vascos ya se encuentran sumidos en una dinámica preelectoral que, a su modo de ver, hace imposible el entendimiento para que las instituciones autonómicas puedan sacar adelante las más de 30 iniciativas parlamentarias actualmente pendientes de aprobación.

Según las encuestas publicadas en los últimos meses, el conservador Partido Nacionalista Vasco (PNV) de Urkullu —que gobierna en coalición junto al PSE, la rama vasca del PSOE— parte como favorito en estas elecciones, de las que previsiblemente nacerá de nuevo un parlamento muy fraccionado sin mayorías claras, lo que obligará a actores diferentes a buscar acuerdos.

"Para mayor comodidad sería deseable que el próximo Gobierno contara con una mayoría absoluta, y si fuera monocolor, pues mejor que mejor, pero sabemos que eso no es posible actualmente en Euskadi", señaló Urkullu durante su comparecencia.
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