"El próximo mes vamos a instalar una cámara ahí (en la zona conocida como Puente Rimas) y otras en función a la posibilidad porque no vamos a llegar al monumento con fibra óptica. Lo que vamos a hacer es poner una señal repetidora en algún punto que permita la instalación de cámaras en puntos estratégicos", dijo José Bastante, jefe de la ciudadela, en declaraciones a la agencia Andina.
Asimismo, Bastante indicó que se elevará el número de vigilantes en la zona arqueológica a mediados de febrero; actualmente se cuenta con 60 personas encargadas de la vigilancia del santuario y 40 instaladas en los puestos del control.
La mejora de estas medidas de vigilancia se extenderán a las horas nocturnas, indicó el funcionario.
La semana pasada, el Gobierno peruano ordenó la expulsión de cinco de seis ciudadanos extranjeros que dañaron la estructura.
Uno quedó detenido en Perú, donde se le inició un proceso judicial por el delito de daño al patrimonio de la Nación.
Machu Picchu, considerada como una de las 7 maravillas del mundo, es el principal atractivo turístico de Perú; recibe cerca de 1,5 millones de turistas al año, según datos del Ministerio de Comercio Exterior y Turismo.