"El embajador iraní Mohajer fue convocado al Ministerio de Asuntos Exteriores de Suecia tras el derribo del avión" ucraniano, escribió Linde en su cuenta de Twitter.
Añadió que Suecia exige "la cooperación, la rapidez y la transparencia" en la investigación de la tragedia, que cobró vidas de nacionales suecos, entre otras víctimas, y que Irán "asuma la responsabilidad ante los familiares de los muertos en lo que respecta al pago de las indemnizaciones".
"El enfoque ahora está en ayudar a los vivos", indicó.
La aeronave Boeing 737-800 de Ukraine International Airlines se estrelló el 8 de enero pocos minutos después de despegar del aeropuerto de Teherán rumbo a Kiev.
La catástrofe aérea tuvo lugar horas después de que el Ejército iraní bombardeara dos bases militares estadounidenses en Irak en represalia por el asesinato del general Qasem Soleimaní, comandante de la Fuerza Quds de los Guardianes de la Revolución, varios días antes en Bagdad.
El 11 de enero el Estado Mayor iraní admitió que el avión ucraniano fue derribado por error después de ser identificado como un blanco enemigo tras acercarse demasiado a una importante instalación militar.
El presidente iraní, Hasán Rohaní, trasladó sus condolencias a las familias de los fallecidos en el accidente aéreo y prometió castigar a los responsables de la catástrofe.