"Lamentamos profundamente informar que la iglesia institucional San Francisco de Borja, donde fueron despedidos nuestros más de mil mártires, es incendiada por una turba de vándalos; el templo fue construido en 1876 y fue entregado a Carabineros hace más de cuatro décadas", denunció la policía a través de su cuenta de Twitter.
Según testigos del siniestro, un grupo de encapuchados habría ingresado al templo para sacar las bancas de madera y posteriormente, iniciar un incendio en el lugar.
Tres unidades de Bomberos de Santiago llegaron a la emergencia para controlar la situación.
Este templo está destinado al servicio religioso de la policía uniformada chilena.
La situación se generó tras una manifestación pacífica en el centro de la capital, en el contexto de la crisis social que afecta al país desde octubre de 2019.