"El presidente nunca permitirá que EEUU ingrese a ningún acuerdo de control de armas que no tenga sentido para EEUU", dijo Pompeo ante la pregunta de si Washington sigue negándose a negociar la defensa con misiles, pese a las críticas de China y de Rusia.
El secretario de Estado sostuvo además que Trump no renovaría ningún convenio de armas si contraviene el interés de su país.
Washington tendrá presente la cuestión de la seguridad nacional y de la estabilidad global cuando se trate de asuntos como control de armamentos, según Pompeo.
El nuevo Tratado de Reducción de Armas Estratégicas (START, por sus siglas en inglés) es el último convenio de control de armamento vigente entre Rusia y EEUU.
El acuerdo estipula una reducción a la mitad la cantidad de lanzaderas de misiles nucleares estratégicos y limita a 1.550 el número de cabezas nucleares desplegadas.
Funcionarios de Estados Unidos manifestaron interés en negociar un nuevo tratado con Rusia que pudiera incluir más tarde a China.