"Hay una realidad que se observa dentro de los EEUU que muestra un conflicto y un enfrentamiento estructural entre los grandes actores globalistas financieros con mucho peso, o peso decisivo, en la Reserva Federal, en la city financiera de Nueva York y en el Partido Demócrata norteamericano, particularmente en el sector del establishment que lo controla, que hace a la conformación de estas figuras de los Clinton y de los Obama".
"La Perestroika Soviética (1989-91) dio inicio a la caída del bipolarismo este-oeste resultante de la Segunda Guerra Mundial (1929-1944). […] En el inicio de su fin, ya estaba emergiendo el unipolarismo globalista de cities financieras, lo que dio sustrato al Consenso "Unipolar" de Washington de 1989. […] Con la crisis financiera de 2001-2008, que manifiesta el inicio de la Caída del Unipolarismo Continentalista de EEUU, entramos claramente en la etapa de la caída del último actor del bipolarismo".
Formento señala que 'este actor', es decir, el actual EEUU, "viene con una crisis profunda en la confrontación con el 'viejo actor' del bipolarismo resultante de la Segunda Guerra Mundial y de la crisis de 1929, que es ese actor que hace al continentalismo norteamericano, centrado en Washington en el complejo industrial militar".
"Esa realidad norteamericana, puesta de manifiesto a partir del triunfo electoral sorpresivo de Trump, pone de manifiesto una crisis al interior de los EEUU, que de alguna manera nos permite plantear que esta crisis expresa la imposibilidad de la continuidad de ese actor, que fue triunfante en la Segunda Guerra Mundial, que se consolida como el gran actor del Occidente, y que hoy se encuentra en una imposibilidad estructural de seguir reproduciendo sus condiciones de dominación en lo económico, en lo político y en lo estratégico", concluye Walter Formento.