La caída de Tenochtitlán: ¿por qué pereció la civilización azteca?

La tribu azteca llegó al valle de México desde el norte, la tierra que ahora es parte de Estados Unidos. Allí se ubicaba su mítica casa ancestral, la isla Aztlán, que abandonaron en el siglo XII. En la foto: unos murales de Diego Rivera que representan la vida cotidiana en la época azteca en el Palacio Nacional de la Ciudad de México.

Después de largas peregrinaciones, los aztecas llegaron al lago de Texcoco y fundaron a sus orillas Tenochtitlán, la futura capital de su imperio, en 1325. En la foto: una imagen artística de Tenochtitlán.

Para la época de la Conquista, el Estado azteca ocupaba el territorio desde el golfo de México hasta el océano Pacífico, desde las desembocaduras de los ríos Balsas y Panukodo hasta las tierras mayas. Existían colonias separadas en tierras guatemaltecas. Por otro lado, la ciudad-estado de Tlaxcallan en el norte del valle del Pueblo no obedecía a los aztecas. En la foto: una maqueta de Tenochtitlán en el museo de la Ciudad de México.

El imperio azteca era étnicamente diverso. En la foto: la imagen del ritual de sacrificio del libro azteca llamado Codex Magliabechiano.

La civilización azteca tenía una rica mitología. Según uno de los mitos, la Tierra fue creada por dos dioses gemelos llamados Tezcatlipoca y Quetzalcóatl. En la foto: la máscara de una deidad azteca Xiuhtecuhtli en el Museo Británico de Londres.

Los aztecas eran un pueblo beligerante, pero se dedicaba a la agricultura, la minería, la extracción de plata y de oro, la cerámica, las armas, la metalurgia y la costura de ropa. En la foto: una maqueta del mercado azteca de Tlatelolco en el museo de Historia Natural en Chicago.

En la agricultura, los aztecas lograron inventar los jardines flotantes de chinampas y la red de irrigación. En la foto: una maqueta de Tenochtitlán en la Ciudad de México.

Mucha atención se prestaba al desarrollo de la escritura y la ciencia. Sobre la base de su propia escritura los aztecas crearon una literatura madura, principalmente narrativas épicas sobre los orígenes de los indios, viajes ancestrales, guerras e inundaciones. Foto: la Piedra del Sol, también conocida como el calendario azteca.

Los elementos principales de la arquitectura azteca eran templos piramidales de hasta 70 metros de altura. En la foto: esculturas en los escalones del Templo Mayor en el centro de la Ciudad de México.
Los hermosos conjuntos de palacios y estructuras, desafortunadamente, fueron destruidos por los conquistadores. Pero la escala y el profesionalismo de los antiguos arquitectos aztecas se pueden apreciar gracias al principal templo azteca, el Templo Mayor, que fue tallado directamente en la roca y fue descubierto a finales del siglo XX en el centro de la Ciudad de México.

El Museo Nacional de Antropología en la Ciudad de México. Un modelo del Templo Mayor de Tenochtitlán.

La cultura de este asombroso pueblo alcanzó su apogeo a principios del siglo XVI. En la foto: página 12 del libro Codex Borbonicus que se encuentra en la Bibliothèque de l'Assemblée Nationale de París.

Cuando llegaron los conquistadores españoles liderados por el general Cortés, los aztecas se rindieron sin luchar porque equivocadamente lo confundieron con el sumo sacerdote exiliado. Lo identificaban con el dios del Sol y había prometido regresar en aquel momento. En la foto: unos cráneos de la cultura azteca en la exposición El Colorido de la Gran Tenochtitlán en el museo del Templo Mayor de la Ciudad de México.

Después de la invasión española, la civilización azteca prácticamente dejó de existir, las ciudades y los templos fueron destruidos y los libros fueron quemados. En la foto: el dios azteca de los muertos Mictlantecuhtli.

En el siglo XVI, como consecuencia de la epidemia de la enfermedad conocida como 'europea' —la fiebre tifoidea—, unos 15 millones de aztecas, es decir, más del 80% de la población, murieron. En la foto: un descendiente de los aztecas moderno.

El imperio azteca, que existió durante dos siglos, dejó una rica herencia cultural. En la foto: una máscara azteca con turquesa, alrededor de 1400-1521.

Los artefactos culturales aztecas se pueden ver en los museos más famosos del mundo. En la foto: una serpiente azteca de dos cabezas hecha de turquesa de la colección del Museo Británico.

Hoy en día, los aztecas son el pueblo indígena más numeroso de México, con más de 1,5 millones de personas. En la imagen, un fragmento de la exposición El Colorido de la Gran Tenochtitlán en el museo del Templo Mayor de la Ciudad de México.