La escena ocurrió en julio en el colegio Emaús, en El Palomar, en el Gran Buenos Aires, pero recién ahora las imágenes tomaron repercusión en las redes y en los medios argentinos que no salen del asombro.
Según distintas publicaciones locales, el arma en cuestión era de juguete y se trató de una broma de pésimo gusto. Tras la viralización del vídeo, el establecimiento educativo decidió tomar cartas en el asunto.
"Los hechos allí expuestos ya han sido sustanciados por la institución", señala una publicación del colegio en Facebook en donde se informa que los alumnos de 16 años han sido sancionados "conforme a los protocolos correspondientes".