"El Ministerio de Energía de Rusia observa la situación estable en los mercados mundiales de petróleo en este momento", dice el comunicado.
"Destacamos el importante papel de nuestros socios de Arabia Saudí y de los países de la OPEP+ en la minimización del efecto de las acciones desestabilizadoras en el mercado. La rápida recuperación de las capacidades de la producción en Arabia Saudí tras el ataque de drones demostró una vez más el profesionalismo y la fiabilidad de los mayores productores de la industria, así como la capacidad de responder rápidamente a las incertidumbres", recalcó el Ministerio.
El ente hizo hincapié en que el rápido regreso de las cotizaciones del petróleo a su posición anterior demostró la recuperación de la confianza del mercado en las acciones de los países "productores".
"Rusia sigue cooperando activamente con Arabia Saudí y los socios de la OPEP+ para mejorar la estabilidad y previsibilidad del mercado", agregó el Ministerio ruso.
Los hutíes del movimiento yemení Ansar Alá, contra los que lucha la coalición árabe con Arabia Saudí a la cabeza, afirmaron que fueron sus combatientes quienes atacaron las empresas saudíes.
El ataque redujo en 5,7 millones de barriles la producción diaria de Saudi Aramco, estimada en unos 9,8 millones de barriles, y provocó una subida del petróleo sin precedentes desde la Guerra del Golfo (1990-1991), pero más tarde los precios bajaron ante la noticia de que Arabia Saudí no tardaría mucho en recuperar el volumen.