El incidente ocurrió durante un vuelo de entrenamiento, donde las dos aeronaves se acercaron demasiado entre sí y la punta alar de una de ellas impactó contra la cabina de pilotos del segundo. Como consecuencia de ello, el ala del primer Su-34 quedó sustancialmente dañada, mientras que los fragmentos resultantes dañaron el motor del segundo avión.
Durante las maniobras que siguieron al impacto hubo un choque más. A pesar de los daños sufridos, los dos bombarderos tácticos lograron aterrizar sin más percances y sin que hubiera heridos. Sin embargo, según informa el medio ruso Russkoe Oruzhie, las dos aeronaves no podrán ser reparadas.