"Para las 14:30 (hora local) unas 350 personas participaron en un evento no autorizado en el centro de Moscú, 30 personas fueron detenidas por alterar el orden público", reza el comunicado.
El evento no fue acordado con las autoridades de la capital de Rusia. Ígor Borisov, miembro del Consejo de Derechos Humanos bajo la presidencia de la Federación de Rusia, elogió las acciones de los organismos encargados de hacer cumplir la ley durante la manifestación.
Quienes habían violado la ley subieron a los autobuses de la policía a través de sus propios medios. No hubo detenciones violentas.
"Todo se realiza muy adecuadamente en términos de las acciones de los organismos encargados de hacer cumplir la ley. Todos actúan en virtud de sus propias responsabilidades funcionales. Estamos hablando de los organismos de orden público que mantienen toda la situación bajo control y no repasan los límites establecidos por los actos jurídicos reglamentarios referentes a los eventos masivos no autorizados por las autoridades", especificó Borisov.
Anteriormente se había informado que el 3 de agosto la oposición planeaba celebrar una manifestación por la negativa del comité electoral de la capital de aceptar candidaturas de ciertos políticos independientes a la Duma de Moscú (asamblea legislativa), alegando que habían excedido el número de firmas de apoyo inválidas.
El solicitante del evento era el Partido Libertario. En el ayuntamiento se sugirió que se realizara el evento en la avenida Sájarov, pero los solicitantes insistieron con la plaza Lubianka. El Partido Libertario detuvo las negociaciones y retiró la solicitud.
La nominación de candidatos para diputados de la Duma de Moscú finalizó el 5 de julio. Según los resultados de la campaña electoral, se registraron 233 personas, entre ellas 171 representantes de partidos y 62 independientes, 57 candidatos fueron rechazados.
Las elecciones se celebrarán el 8 de septiembre.
La Policía de Moscú había instado a los ciudadanos a abstenerse de participar en la manifestación no autorizada y había advertido sobre el riesgo de provocaciones. La Policía dijo que los agentes del orden responderían "con prontitud" a los delitos y que tomarían medidas para garantizar la ley, el orden y la seguridad de los ciudadanos.
El 27 de julio pasado se celebró un mitin que tampoco contaba con el permiso de la autoridad para expresar protestas por el mismo motivo.
En aquel entonces la Policía detuvo a más de 1.000 personas y más tarde el Comité de Investigación ruso abrió casos penales por disturbios masivos y uso de la fuerza contra agentes del Ministerio del Interior y la Guardia Nacional de Rusia.