En el punto de mira se encuentran los nuevos procesadores Elbrus 8S, fabricados por MCTS, una empresa rusa de investigación y de fabricación de microprocesadores de alto rendimiento universales con sede en Moscú.
Los chinos quieren utilizar estos procesadores rusos en sus servidores. Sin embargo, según la fuente de RBK, las negociaciones aún no superaron la fase inicial.
Además de MCTS, también recibió una propuesta comercial de Huawei Norsi-Trans, la compañía especializada en sistemas para actividades de investigación operativa. "Llegó una delegación de Huawei de Hong Kong y ofreció 100 millones de dólares por todo Norsi-Trans", dijo en una entrevista a RBK el director general de la compañía Serguéi Ovchínikov. No obstante Ovchínikov supone que es una forma de expandirse en el mercado ruso, eliminando la competencia.
"A mí me parece que ellos quieren que dejemos de elaborar los servidores rusos y empecemos a utilizar los servidores de Huawei. No es de interés para nosotros", dijo.
Otro objeto de interés de Huawei es la línea de sistemas operativos Alt que podría utilizarse en sus computadoras personales. "Alt es el producto más independiente de todos los sistemas basados en Linux".
"Tal vez por esto atrajo la atención de Huawei", comentó en su entrevista a RBK Renat Yusúpov, el primer vicepresidente de Kraftway, la compañía IT más grande de Rusia.
Los acuerdos con Huawei pueden ser muy productivos para ambas partes, aunque varios expertos dudan que gracias a Huawei las empresas rusas reciban un empujón para salir al mercado internacional.
"Los tratados con Huawei es posible que tengan carácter local, y la compañía china los utilizará para su promoción en el mercado ruso", opina Nikolái Komlev, director ejecutivo de la Asociación de Instalaciones de Tecnología Digital, citado por RBK. Komelev cree, que el uso del hardware y software rusos permitirán a Huawei posesionarse como una empresa rusa.