El 10 de junio, la Cámara de Representantes de EEUU aprobó por unanimidad una resolución que llama a la Casa Blanca a imponer sanciones a Turquía si Ankara obtiene los sistemas antiaéreos S-400 rusos.
"Todos nuestros compromisos serán cumplidos plenamente y a tiempo", respondió Riabkov a la pregunta si Moscú garantiza la ejecución del contrato con Turquía mientras esté presionada por Estados Unidos.
El diplomático ruso calificó de "chantaje abierto y cínico" la resolución de la Cámara de Representantes de Estados Unidos.
Por su parte, el Ministerio de Exteriores turco tachó la resolución de la Cámara baja del Congreso estadounidense de "golpe a la confianza" entre Ankara y Washington, y declaró que no aceptará "los ataques irracionales e injustos" a su política exterior que contiene el documento.
Turquía, miembro de la OTAN, ha declarado en repetidas ocasiones que no piensa retractarse del contrato de 2.500 millones de dólares suscrito con Moscú en diciembre de 2017 y que la primera partida de los S-400 debe llegar en julio.
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Washington amenazó a Ankara con imponer sanciones por la compra de los S-400 y suspender la entrega de cazas estadounidenses F-35.
Sanciones de EEUU contra Irán
Además, Riabkov declaró que Rusia no acepta el aumento de las sanciones contra Teherán por parte de los Estados Unidos.
"EEUU declara abiertamente que reforzará las sanciones contra Teherán, para Moscú esto es completamente inaceptable", dijo Riabkov a la prensa.
En mayo de 2018, EEUU anunció su retirada del acuerdo, acusando a Teherán de continuar en secreto su programa nuclear, y restableció desde entonces varios paquetes de sanciones contra Irán.
Al año siguiente, Teherán anunció la decisión de abandonar una parte de los compromisos asumidos en el marco del PAIC. Irán advirtió que las medidas entrarán en vigor dentro de 60 días si no hay avances por parte de los países europeos signatarios del pacto.