"Un grupo de nuestros militares viajaron a Rusia para estudiar el funcionamiento de los S-400, su entrenamiento ya ha comenzado", dijo Akar citado por la cadena NTV.
"Ya se nos han entregado cuatro aviones F-35, cuatro de nuestros pilotos actualmente están estudiando en EEUU y también allí se encuentran 47 oficiales que se ocupan de mantenimiento", comunicó Akar.
Añadió que otros dos cazas F-35 llegarán a Turquía en noviembre y estarán estacionados en la base aérea de Malatya.
"Turquía cumple sus obligaciones de coproducción con toda seriedad, y nuestra expectativa legítima es que el programa F-35 se ejecute, según lo planeado", subrayó.
El ministro también recordó que el contrato de F-35 con EEUU no contempla su suspensión en el caso de la compra de S-400 por Ankara.
Washington amenazó a Ankara con imponer sanciones por la compra de los S-400 y suspender la entrega de cazas F-35.
La Casa Blanca, que busca venderle a Turquía las baterías antiaéreas Patriot, alega que los equipos rusos son incompatibles con los estándares de la OTAN.
Infografía: S-400 vs. Patriot: así son los competidores ruso y estadounidense en el mercado de la defensa antiaérea
El S-400 (SA-21 Growler en la clasificación de la OTAN) es capaz de abatir aparatos aéreos de tecnología furtiva, misiles de crucero, misiles balísticos tácticos y táctico-operativos.
Con un alcance de hasta 400 kilómetros, el equipo ruso puede destruir blancos a alturas de hasta 30 kilómetros.