"El Reino Unido podría solicitar un nuevo aplazamiento que conllevaría grandes riesgos para la UE, por eso se requiere una seria justificación", dijo Barnier.
Agregó que si el Parlamento británico no avala en los próximos días el acuerdo sobre las condiciones del divorcio, la única opción que queda sería el Brexit duro o una nueva prórroga más prolongada.
"Un nuevo proceso político (…), la convocatoria de un nuevo referéndum que dependerá del Reino Unido o elecciones nacionales", enfatizó.
Barnier recalcó que hasta el momento no se han dado las circunstancias políticas para frenar la salida de los británicos.
"No veo condiciones políticas para ello", apostilló.
El Reino Unido que debía salir del bloque comunitario el 29 de marzo, recibió plazo hasta el 12 de abril para que presente un plan B o se marche ese mismo día.
Además: El culebrón del Brexit se eterniza
Este 2 de abril, el Gabinete de May tiene previsto abordar el persistente estancamiento del proceso Brexit.
El Legislativo británico ha rechazado en tres ocasiones el Tratado de retirada de la UE acordado por el Ejecutivo de May en noviembre de 2018.