La emisora Radio Kim informó citando a Thaci que la Administración de EEUU llama a las autoridades de Kosovo a solucionar los problemas actuales, en particular, aquellos relacionados con los aranceles a los artículos procedentes de Serbia y Bosnia y Herzegovina, para continuar el diálogo con la UE.
El líder kosovar añadió que las pérdidas de decenas de millones de euros que sufre Serbia cada mes no son comparables al daño a las relaciones entre Pristina y Washington, que "no tienen precio".
Previamente el presidente del parlamento de Kosovo, Kadri Veseli, propuso cesar por 120 días los aranceles aduaneros impuestos a los productos de Serbia y Bosnia y Herzegovina.
El primer ministro kosovar, Ramush Haradinaj, se opuso a suspender los aranceles hasta que Serbia reconozca la independencia de la república.
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Sin embargo, bajo la presión de Bruselas, Belgrado se vio obligado a iniciar negociaciones con la mediación de la UE para normalizar las relaciones con Pristina.
Por el momento, la independencia de Kosovo ha sido reconocida, en particular, por EEUU, Canadá y la mayoría de los miembros de la UE, pero no goza del reconocimiento de Rusia, China, España, Irán, Israel o Grecia, entre otros países.
A finales de noviembre del año pasado, el Gobierno de Kosovo aumentó los aranceles del 10 al 100 por ciento a los productos procedentes de Serbia y Bosnia y Herzegovina.