"Considerando la situación extremamente grave en la zona de distensión de Idlib esperamos que nuestros socios turcos incrementen los esfuerzos para resolver la situación y cumplir plenamente con los compromisos en el marco de los acuerdos de Sochi sobre Idlib", dijo Zajárova.
Turquía se comprometió a retirar a los terroristas de esa zona, pero hasta el momento el proceso se ve entorpecido.
Asimismo, Zajárova recordó que llegó información de que el Frente al Nusra (grupo terrorista prohibido en Rusia y otros países) se dirigió a finales de enero a sus aliados de otros grupos terroristas, Huras ad Din y el Partido Islámico de Turkestán, también prohibidos en Rusia, para preparar juntos un ataque a gran escala.
"Evidentemente, el objetivo de los terroristas es establecer el control sobre toda la zona de distensión de Idlib", dijo Zajárova.
La portavoz diplomática rusa también denunció que los yihadistas siguen acumulando las reservas de las sustancias tóxicas a lo largo de toda la línea de separación con las tropas sirias.
El 5 de febrero el jefe de la Red Siria de Derechos Humanos, Ahmad Kazem, dijo a Sputnik que el Frente al Nusra está preparándose para usar gas cloro contra civiles en la ciudad de Jan Sheijun, en la gobernación siria de Idlib.
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También comunicó que representantes de los Cascos Blancos llevaron equipos de vídeo a varios hospitales en Idlib para filmar un falso ataque químico del cual responsabilizarían a Damasco.
Rusia desmontó el año pasado varios vídeos difundidos por los Cascos Blancos sobre supuestos ataques químicos en Siria que Estados Unidos, el Reino Unido y Francia usaron como pretexto para bombardear el país árabe.
El propio Gobierno sirio cataloga a los Cascos Blancos como una fachada del grupo terrorista Frente al Nusra que ahora se hace llamar Hayat Tahrir al Sham.