En un comunicado, los representantes del líder de la izquierda brasileña criticaron que la Justicia decidiera validar las "declaraciones sin pruebas" de Palocci, "que salió de la cárcel y se fue a casa, con buena parte de su patrimonio intacto, a cambio de mentiras sin pruebas contra el expresidente".
"Es curiosa la divulgación de esa declaración sin pruebas justo hoy, cuando otro chófer protagoniza el noticiario", ironiza el comunicado de parte de Lula, en alusión a Fabricio Queiroz, antiguo chófer del senador electo Flávio Bolsonaro, hijo del presidente brasileño Jair Bolsonaro.
El hijo de Bolsonaro está en el punto de mira porque habría usado a su chófer para recibir dinero de forma irregular; la investigación se estaba desarrollando en Río de Janeiro, pero Flavio Bolsonaro consiguió una decisión provisional del Tribunal Supremo Federal para impedir que el caso avance.
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