"Theresa May ha desperdiciado dos años negociando un mal acuerdo que dejará al país sin (el derecho de) decisión", denunció el líder laborista, Jeremy Corbyn, en su cuenta de Twitter.
Para la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, el texto consensuado por los negociadores de Londres y Bruselas es "el peor de todos los mundos posibles".
El criticismo fue particularmente duro desde el frente conservador euroescéptico radical.
"No ofrece el Brexit que el electorado votó en el referéndum (de 2016)", espetó el diputado tory Peter Bone en la sesión de preguntas a la primera ministra que se celebra en el Parlamento de Westminster.
Audio: Cada día más incertidumbre: el Brexit podría no ser
May se defendió reiterando que el preacuerdo de divorcio logra "recuperar el control del dinero, las leyes", la política pesquera, la inmigración y "protege la integridad del Reino Unido".
"Nos preocupa la narrativa que está creciendo en torno a la propuesta de la primera ministra", señaló la líder del DUP, Arlene Foster.
May se reunió este 14 de noviembre con su Gabinete en un encuentro de emergencia sobre el pacto del Brexit que se prolongó por más de cinco horas.
El visto bueno de los ministros británicos permitiría convocar una cumbre del Consejo Europeo con la misión especial de aprobar el documento legal definitivo del divorcio del Reino Unido.