"Tenemos relaciones especiales y estrechas con Grecia y no nos planteamos el objetivo de sacrificarlas", alegó, entrevistado en ocasión de su presencia en el foro Diálogo de Civilizaciones celebrado en Rodas.
"El factor religioso juega su papel, los lazos entre ambos pueblos son fuertes, pero la política tiene su propia lógica, en Grecia habían políticos que experimentaban una fuerte presión y tomaron una decisión que lamentamos", comentó.
El vicetitular expresó su confianza en que "los problemas con Grecia serán superados pronto, y las relaciones greco-rusas se desarrollarán".
"Además de la simpatía común entre nuestros pueblos, tenemos intereses comunes", concluyó.
En agosto Grecia decidió expulsar a dos diplomáticos rusos y prohibió a otros dos el ingreso al país por "acciones ilegales contra la seguridad nacional".
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Además, el ministro de Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, debía haber viajado a Atenas en el marco de los preparativos para la visita del primer ministro griego, Alexis Tsipras, a Rusia.
Tsipras dijo a principios de septiembre que tiene pendiente una invitación para visitar Rusia en 2018 y espera que los diplomáticos de los dos países estudien este asunto.