El objetivo del entrenamiento, según el comunicado, fue "reforzar las capacidades de respuesta conjuntas de Japón y EEUU y mejorar las habilidades tácticas".
De parte de Japón participaron en el entrenamiento 12 aviones de combate F-15, de las bases de Chitosa. Komatsu y Naha, y 4 aviones F-2 de la base de Tsuiki.
La Fuerza Aérea de EEUU estuvo representada por un bombardero estratégico B-52.
El mar de la China Oriental es una región en la que Tokio mantiene una disputa territorial con Pekín por las islas Senkaku, o Diaoyu, según su denominación china.
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