El cura estará privado del ejercicio público y tendrá que residir en ese tiempo en un monasterio o convento fuera de la localidad.
Esta decisión fue tomada por la Congregación para la Doctrina de la Fe del Vaticano tras la investigación de los hechos.
Según su estudio, "consideran probados los hechos denunciados por la víctima y, por tanto, reconoce la comisión de un delito grave de abusos sexuales a menores tipificado en el canon 1395", según explicó este 17 de septiembre en una rueda de prensa el obispo de Astorga, Juan Antonio Menéndez.
El obispo de Astorga afirmó que expresó su "dolor" por la gravedad del delito cometido y le pidió "perdón en nombre de toda la comunidad diocesana".