En concreto, las nuevas tarifas, de entre el 25 y el 40%, se aplicarán a la importación de algunos equipos de construcción de carreteras, industria de hidrocarburos, procesamiento de metales y perforación de rocas, así como fibras ópticas.
El aumento de las tarifas rusas permitirá por el momento compensar solo una parte de ese daño económico, 87,6 millones de dólares, valor que corresponde a la compensación a la que Rusia tiene derecho ahora, conforme a las reglas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), explicó el titular de esa cartera, Maxim Oreshkin.
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Moscú podrá aplicar el resto de las medidas de compensación tres años después de la entrada en vigor de los nuevos aranceles de EEUU, es decir a partir del 21 de marzo de 2021, o tras una decisión del órgano de solución de diferencias de la OMC sobre la incompatibilidad de las tarifas estadounidenses con las normas de la organización.
Si las consultas no desembocan en una solución mutuamente aceptable de la disputa, Rusia pedirá a la OMC crear un grupo de arbitraje que resuelva sus diferencias con EEUU, señaló el Ministerio de Desarrollo Económico.