"La atención se centró en las cuestiones de la lucha contra una amenaza de que se refuerce la organización terrorista ISIS (Estado Islámico, proscrito en Rusia y otros países) en el territorio de Afganistán", dice el comunicado.
Se agrega que los directores de los Servicios de Inteligencia de los cuatro países "coincidieron en la necesidad de medidas coordinadas para impedir la entrada de los terroristas de Daesh de Siria e Irak en las provincias afganas".
Se afirma también que, al intercambiar opiniones, todas las partes destacaron la importancia de intensificar la participación de las potencias regionales en la solución del conflicto afgano.
Afganistán vive una situación de inestabilidad política, social y de seguridad a raíz de los ataques que lanzan el movimiento radical Talibán y, desde 2015, el grupo terrorista ISIS, pese a la fuerte presencia militar de Estados Unidos y otros países de su órbita.