"Se mantendrá sin cambio la resolución emitida en primera instancia", falló la juez al desestimar el recurso de los abogados.
Con este veredicto cobra fuerza legal la resolución judicial sobre el bloqueo, aunque el regulador ruso de los medios de comunicación, Roskomnadzor, recibió el derecho de implementarla a mediados de abril, en el marco de un procedimiento especial aprobado después de que la sentencia se diera a conocer en primera instancia.
Esa situación, a juicio de los defensores, pone en peligro la seguridad ciudadana.
El abogado Ramil Ajmetgalíev dijo a Sputnik que su equipo no piensa tirar la toalla.
"Enviaremos una queja al Tribunal de Estrasburgo. Ya presentamos una denuncia contra la orden del FSB que obliga a entregar las claves de cifrado, ahora vamos a denunciar el bloqueo en sí. También remitiremos una queja a la presidencia del Tribunal de la Ciudad de Moscú y a la Corte Suprema", precisó.
El FSB sostiene que es un canal ampliamente usado por los terroristas.
Telegram se niega a acatar la exigencia del servicio de seguridad ruso alegando que viola el principio constitucional del secreto de la correspondencia, y procura evadir el bloqueo sin vulnerar la privacidad de sus usuarios.