Las entregas del producto al exterior generaron ingresos por 1.736 millones de dólares en el primer trimestre.
Paralelamente, Rusia aumentó un 50% las importaciones de trigo, al comprar 88.200 toneladas por 12,4 millones de dólares.
Las compras de cebada registraron en el primer trimestre una brusca caída de más del 90%, con 3.300 toneladas del producto por 600.000 dólares, aunque en marzo repuntaron con 2.300 toneladas.
El país disminuyó un 10,2% las importaciones de maíz, hasta 26.700 toneladas (109,3 millones de dólares).
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Rusia exportó el anterior año agrario (que empezó el 1 de julio de 2016 y finalizó el 30 de junio de 2017) 35,47 millones de toneladas de granos, incluidos 27,07 millones de toneladas de trigo.
Este año el país prevé colocar en el mercado internacional 53 millones de toneladas de granos, de ellos 40 millones de toneladas de trigo.