"Hoy lo más importante es saludar esa reunión, pero todavía hay mucho por hacer para resolver la crisis", dijo el funcionario a la prensa en Bruselas, donde se celebra el encuentro de los ministros de Exteriores del bloque militar.
"El primer paso es importante", subrayó el secretario general de la OTAN.
Pese a los avances, Stoltenberg llamó a continuar la presión a Corea del Norte mediante las sanciones.
"La presión política, diplomática y económica es importante (…) Creo que la presión internacional ayudó a llegar a la situación que tenemos hoy", insistió.
El encuentro de este 27 de abril entre los líderes de las dos Coreas se convierte en la tercera cumbre, después de las dos anteriores que tuvieron lugar en junio de 2000 y en octubre de 2007, y se produce tras un año de tensiones en el que el Norte disparó una quincena de misiles balísticos y llevó a cabo su sexta prueba nuclear.
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