"Observamos una situación bastante equilibrada del mercado de divisas", dijo la vicegoberndora de la entidad, Ksenia Yudáeva, al intervenir en un foro bancario en Moscú.
El debilitamiento de la moneda rusa se produjo después de que el Gobierno de Estados Unidos extendiera el 6 de abril sus restricciones a 38 empresarios y compañías rusas, entre ellas la exportadora de armas Rosoboronexport, el gigante del aluminio Rusal, los conglomerados industriales Russian Machines, Basic Element, la empresa automotriz GAZ y otras.
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El índice de liquidez el 9 y 10 de abril, señaló, fue inferior al que se registró habitualmente en los meses anteriores, pero fue mejor que en los periodos anteriores del aumento de la volatilidad.
"El crecimiento de la volatilidad no creó riesgos para la estabilidad del sistema financiero y los mercados", remarcó la alta funcionaria.