El doctor dijo al periódico Hurriyet Daily News que la organización "se puso en contacto con el Comité Internacional de la Cruz Roja" y que "la ONU y las Fuerzas Armadas turcas permitieron que el convoy humanitario entre en el centro de Afrín".
El 20 de enero, Ankara y sus aliados del opositor Ejército Libre Sirio lanzaron la Operación Rama de Olivo en el cantón de Afrín, provincia noroccidental siria de Alepo.
La operación va dirigida contra grupos yihadistas y las Unidades de Protección Popular (YPG), brazo armado del Partido kurdo-sirio de la Unión Democrática (PYD).
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Para Turquía, las YPG son una extensión del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK), prohibido en el país por considerarse una organización terrorista.
A finales de febrero pasado, el Consejo de Seguridad de la ONU aprobó la resolución 2401 que establece un armisticio de 30 días en todo el territorio de Siria para llevar a cabo las operaciones humanitarias.
La tregua permitirá realizar entregas de ayuda humanitaria y evacuar a enfermos y heridos.
Las autoridades de Turquía y las milicias kurdas en Afrín declararon que están dispuestos a respetar la resolución del Consejo de Seguridad de la ONU.