La modelo va compartiendo fotos de su cuerpo en Instagram y ahora tiene más de 145.000 seguidores.
Ostergen admite que desde la infancia se consideró un patito feo debido a su extraordinario aspecto físico.
No obstante en 2013 la joven decidió empezar a hacer deporte para combatir la depresión.
La modelo se dedicó al fisicoculturismo y pronto conoció al culturista Torbjorn Ostergren y se casó con él. La pareja tuvo dos hijas, tras lo cual, ella logró mantener su excelente figura pese a la maternidad.