"No importa mucho la sede de las negociaciones, lo más importante es que los bandos enfrentados cumplan los Acuerdos de Minsk", dijo Peskov al comentar la iniciativa del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, de trasladar las conversaciones sobre Ucrania de Minsk a otro lugar.
Más temprano el mandatario de Kazajistán, Nursultán Nazarbáev, informó que Trump durante una reunión que mantuvieron el 16 de enero en Estados Unidos, abogó por el traslado de la sede de las consultas sobre Ucrania.
El funcionario informó que el presidente ruso, Vladímir Putin, y los miembros permanentes del Consejo de Seguridad del país constataron en la reunión de este 19 de enero que la nueva ley de reintegración de Donbás puede afectar el proceso de paz en Ucrania.
"En el contexto de Ucrania [los participantes] intercambiaron opiniones en relación con la recién aprobada ley sobre Donbás, destacando que, sin duda, esta ley puede influir de manera muy negativa en la solución del conflicto interno ucraniano", dijo.
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El documento también define a Rusia como país "agresor", hecho que Moscú rechazó en repetidas ocasiones al subrayar que no es parte del conflicto interno de Ucrania.
La ley entrará en vigor una vez promulgada por el presidente de Ucrania.
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El Ejército ucraniano efectúa desde abril de 2014 una operación militar en Donbás que ha dejado hasta la fecha más de 10.300 muertos, según estimaciones de la ONU.
Los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y las milicias de Donbás no cesan pese a la firma de los pactos de Minsk que sentaron las bases para la suspensión de las hostilidades.
Los acuerdos fueron suscritos en septiembre de 2014 y en febrero de 2015.
La crisis ucraniana se debate también en el marco del llamado cuarteto de Normandía (Rusia, Francia, Alemania y Ucrania), aunque EEUU no participa es una cuestión que se ha planteado en diversas ocasiones.
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A finales de 2016 el Gobierno de Polonia sugirió la incorporación del país y de Estados Unidos en el diálogo sobre Ucrania.
"Moscú busca cooperar con EEUU en la solución de todos los problemas regionales e internacionales, pero, lamentablemente, vemos la falta de voluntad para cooperar precisamente por parte de nuestros colegas estadounidenses", dijo Peskov.
El funcionario comentó así las acusaciones del presidente Donald Trump de que Rusia no colabora para resolver las tensiones con Corea del Norte.
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Peskov subrayó que Rusia "mantiene y mantendrá todos sus compromisos internacionales".
El diplomático ruso destacó la responsabilidad de Rusia y EEUU por el mantenimiento de la paz y la seguridad mundial como miembros permanentes del Consejo de Seguridad de la ONU y grandes potencias nucleares.
"En este contexto, ambas naciones deberían guiarse por una visión estratégica de sus prioridades comunes y promover los contactos a nivel de sus consejos nacionales de seguridad, ministerios, departamentos de seguridad, servicios de inteligencia, parlamentarios y otros", puntualizó.
Rusia, dijo el embajador, pese a las discrepancias "ofrece a los estadounidense centrarse en aquellas áreas en las que los intereses de los dos países coinciden objetivamente".