Otra base, según Agnes Helou, se está construyendo en Al Tanaf, donde los estadounidenses bloquean el paso a las fuerzas rusas y las tropas gubernamentales sirias.
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Según el general retirado del Ejército libanés Wehbe Katicha, citado por la periodista, la rivalidad entre Rusia y EEUU en el territorio sirio, incluso en el contexto de la creación de bases militares, se debe a la posición estratégica del país árabe. Según el experto, Siria es una puerta a Oriente Medio y al Golfo Pérsico.
Además, Wehbe Katicha destacó que la operación militar en Siria permitió a Rusia aumentar las exportaciones de armas. En particular, el acuerdo con Arabia Saudí sobre la entrega de los S-400 Triumf fue un resultado directo de las acciones exitosas del Ejército ruso en Siria.
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Según datos de altos cargos de la ONU, unas 400.000 personas perdieron la vida en el conflicto.
Rusia lanzó en septiembre de 2015 una ofensiva aérea en Siria a solicitud del presidente Bashar Asad.
El 11 de diciembre del año pasado, el presidente ruso, Vladímir Putin, ordenó la retirada del contingente ruso desplegado en Siria, luego de constatar que las autoridades sirias lograron derrotar a las fuerzas de Daesh —grupo terrorista prohibido en Rusia y otros países— con apoyo de Rusia.
El mandatario ruso dejó claro que Moscú mantendrá la presencia en la base aérea de Hmeymim y en el puerto de Tartus y enviará refuerzos en caso de que los terroristas vuelvan a las andadas.