O'Connell dijo que Hankison ha sido acusado de tres cargos en primer grado de poner en peligro deliberadamente a una persona.
El fiscal general de Kentucky, Daniel Cameron, anunció que el uso de la fuerza por parte de dos agentes de policía en la muerte de Taylor estaba justificado bajo la ley estatal después de que su novio les disparara.
Cameron dijo que esta justificación les prohíbe presentar cargos contra los dos agentes.
El fiscal agregó que, según las pruebas, los agentes de policía llamaron a la puerta del apartamento de Taylor y anunciaron su presencia, contrariamente a los informes iniciales de que los agentes de policía ejecutaron una orden de registro de drogas sin tocar a altas horas de la noche.
El disparo provocó que los cuatro agentes de policía lanzaran una lluvia de balas contra la casa, alcanzando a Taylor ocho veces.
Desde entonces, activistas, celebridades y manifestantes se han propuesto mantener su nombre en el ciclo de noticias y pedir justicia por su muerte.
El alcalde de Louisville, Greg Fischer, anunció la semana pasada que la ciudad pagará 12 millones de dólares a la familia de Taylor como parte de una indemnización por su muerte.
Los oficiales dispararon balas de goma contra la multitud y detuvieron al menos a diez manifestantes.
El presidente Donald Trump dijo que tiene la intención de hablar con el gobernador de Kentucky, y calificó el despliegue de la Guardia Nacional en el lugar para sofocar el malestar social como un "hecho positivo".