"El tema del muro no se trató, porque procuramos que el encuentro se diera a partir de las coincidencias, que hiciéramos a un lado las diferencias y que se buscara resolver esas diferencias, que son propias de vecinos y países independientes y democráticos, mediante el diálogo", durante la visita realizada el 8 de julio pasado, dijo López Obrador en una conferencia de prensa.
El espinoso asunto de la barrera fronteriza, en la que se tomó una foto y grabó un vídeo en un punto fronterizo de Arizona, un día antes de la visita, no fue abordado por los mandatarios en sus apariciones públicas, en las que no respondieron preguntas de la prensa.
A GREAT DAY IN ARIZONA! pic.twitter.com/jsohSb5QF6
— Donald J. Trump (@realDonaldTrump) June 24, 2020
"No era un tema que nosotros quisiéramos tratar, que no queremos tratar, agradecemos que no se haya abordado el tema en lo público", subrayó el jefe de Estado mexicano.
López Obrador comentó que "en la cena sí hubo una expresión [de Trump sobre el muro], pero sin propósitos de imponer nada, fue de otro tipo".
Empresarios relataron a corresponsales mexicanos en Washington que durante la cena ofrecida en la Casa Blanca, Trump bromeó sobre su "disciplina" durante las apariciones públicas con su invitado, al no mencionar el "espinoso tema del muro fronterizo", comentario que provocó risas en algunos comensales.
López Obrador dijo que "en lo público, se abordó básicamente el Tratado" de libre comercio, entre México, EEUU y Canadá (T-MEC), que entró en vigor el 1 de julio.
"Se habló sobre la cooperación en enfrentar la pandemia, de cómo nos ayudaron con ventiladores cuando los necesitábamos", recordó el presidente mexicano.
Aseguró que las relaciones bilaterales y el respeto mutuo van a seguir mejorando, "es una nueva realidad y no se pude continuar con la misma actitud de otros tiempos".
Celebró asimismo una "nueva etapa" en el trato hacia los migrantes: "eso quedó de manifiesto y deseo con todo mi alma que continúe ese trato de respeto y no discriminatorio hacia nuestros paisanos".
En efecto, Trump abandonó en sus discursos las descalificaciones a los inmigrantes, reconoció sus "contribuciones extraordinarias valiosas", y recordó que han sido parte de las policías y fuerzas militares de EEUU "durante generaciones".
Los insultos de corte racista y xenófobo a migrantes han sido una constante en las campañas electorales de Trump, como la que está en marcha haca las elecciones presidenciales de noviembre próximo, en la que busca su reelección.