"Sabemos que nuestra imagen no está muy bien por ahí fuera por la desinformación", dijo Bolsonaro en el acto de inauguración de un canal de televisión dedicado al sector agrícola, según recoge el diario O Globo.
El líder brasileño rechazó las críticas a su política ambiental y puso en valor los supuestos logros de Brasil: "Ahí afuera hay países que nos critican, pero no tienen un palmo de vegetación de ribera en los ríos; aquí es exactamente al revés", dijo.
Durante los primeros meses de Gobierno de Bolsonaro la deforestación en la Amazonía se disparó, y los incendios del año pasado causaron una grave crisis de escala internacional.
Antes de esos fuegos, entre agosto de 2018 y julio de 2019 se perdieron 10.129 kilómetros cuadrados de selva, el mayor índice en 10 años, según los datos oficiales del Instituto Nacional de Investigaciones Espaciales (Inpe).
Además, diversas empresas, sobre todo europeas, anunciaron boicot a productos brasileños que puedan estar relacionados con la deforestación ilegal de la selva amazónica.