Según precisó el medio, la Policía detuvo al menos a 1.383 personas desde el 28 de mayo cuando estallaron las protestas por todo el país. La agencia cree que el número real de detenidos puede ser mayor.
Además, un manifestante murió y al menos otros dos resultaron heridas por un tiroteo en la ciudad estadounidense de Indianápolis (estado de Indiana), informó el periódico Indy Star.
"Una persona fue asesinada el sábado [el 30 de mayo] y al menos otras dos resultaron heridas por disparos durante la segunda noche de protestas en el centro de Indianápolis", aseguró el periódico, citando al jefe de policía de la ciudad, Randal Taylor.
La Policía no dio más detalles pero se apresuró a negar la implicación de sus agentes en los sucesos.
Este no es el primer informe de muertes en las protestas contra la brutalidad policial en Estados Unidos. En particular, trascendió que un agente federal murió baleado durante manifestaciones en Oakland (estado de California), mientras que en Detroit (Míchigan), un joven de 19 años falleció después de que un hombre desconocido abriera fuego desde su vehículo contra una multitud de manifestantes.
Las movilizaciones se desencadenaron después de que el vídeo del arresto de George Floyd, ocurrido el 25 de mayo, se volviera viral.
Floyd repetidamente le dice al oficial de policía que no puede respirar hasta que queda inconsciente; murió en un hospital local poco después.
A raíz de su muerte, las manifestaciones se desataron en las ciudades de Minneapolis, St. Paul y otras comunidades circundantes, así como en otras localidades de Estados Unidos.
Las autoridades de Los Ángeles, Filadelfia y Atlanta decretaron el toque de queda por las protestas.