"En las últimas 24 horas se confirmaron 8.599 casos de COVID-19 en 84 regiones del país, de ellos 3.777 (43,9%) asintomáticos", señaló el centro en un comunicado.
La mayoría de los nuevos contagios corresponde a Moscú (2.516), seguido de la provincia homónima (862) y San Petersburgo (384).
En un día, agregó, fallecieron 153 personas por COVID-19, lo que incrementa a 3.541 el total de decesos.
Según el ente, más de 5.000 pacientes se recuperaron de la enfermedad y recibieron el alta en un día.
"En las últimas 24 horas fueron dadas de alta 5.363 personas (...) El total de recuperados asciende a 113.299" a nivel nacional, subrayó el organismo.
Por su parte, la jefa de la Oficina Nacional de Protección al Consumidor (Rospotrebnadzor), Ana Popova, declaró en un programa del canal Rossiya 24 que ninguno de los pacientes con COVID-19 registrados en Rusia murió en su domicilio.
"Para nosotros resulta importante destacar que en Rusia no hay ningún caso de fallecimiento por COVID-19 a domicilio, a diferencia de un grupo considerable de países", destacó la funcionaria.
Popova agregó que en el territorio nacional no se falsifican los datos de muertes provocadas por la pandemia, y en cada caso letal se realiza una investigación anatomopatológica.
El pico de contagios y fallecimientos
La jefa de Rospotrebnadzor también anunció que la cifra de fallecimientos por COVID-19 continuará aumentando, pues el pico de muertes viene después del pico de contagios.
Además, la funcionaria indicó que en Rusia en ningún momento se detectó una escasez de camas en los hospitales o de personal médico.
"Alcanzó personal médico, alcanzaron los médicos para todos los enfermos (...), los médicos son unos héroes", resumió.
Popova aseguró que cada día la cifra de casos detectados de coronavirus en Rusia disminuye.
"No permitimos que hubiera un colapso, logramos evitar una carga excesiva en nuestros centros médicos, en nuestro sistema de Salud, que actuó como era de esperar, es algo evidente", aseguró la funcionaria.
La autoridad también instó a salir de manera paulatina de las restricciones, "con cuidado", sin caer en un "estado de euforia".
La jefa de Rospotrebnadzor anunció que 44 regiones de Rusia, más de la mitad, pueden muy pronto pasar a la primera etapa de suspensión de las restricciones, pues la situación con la pandemia se ha estabilizado.
Por su parte, el candidato a doctor en ciencias económicas y experto del Centro de Estudios Económicos, Agasi Tavadián, opinó en un comentario a Sputnik que Moscú y la provincia homónima es la única región de Rusia que superó el pico de contagios por el coronavirus.
"Solo Moscú y la provincia moscovita superaron el pico del coronavirus", dijo al agregar que se debió ante todo a que "desde finales de abril en la región capitalina aumentó de manera considerable el número de test".
Tavadián indicó que "por un lado, creció el número de enfermos, y por el otro, fueron detectados y aislados contagiados en las etapas más tempranas".
En opinión del experto, el resto de las regiones están pasando por el pico ahora o lo alcanzarán dentro de las próximas semanas. En los distritos federales del Noroeste y del Cáucaso Norte, apuntó, el altiplano será largo, igual que el descenso de la curva de contagios, que podría prolongarse hasta finales de agosto.
"No creo que haya que esperar que el virus desaparezca. Es posible que se debilite. Se está convirtiendo en algo habitual para nosotros", agregó.
Tavadián apuntó que en Rusia menos del 70% de la población ha cumplido la cuarentena, por lo que el confinamiento solo permitió frenar el aumento de los casos del COVID-19 y preparar los hospitales y test.
El experto ve justificado que Moscú y la provincia homónima hayan comenzado a suavizar las restricciones impuestas por la epidemia tras incrementarse los test.
¿Cuándo se quitarán las restricciones?
El epidemiólogo del Ministerio de Salud de Rusia, Nikolái Briko, declaró que las restricciones relacionadas con la pandemia del coronavirus en Rusia se pueden eliminar solo cuando el 60% o el 70% de la población cuente con anticuerpos contra el COVID-19.
"Entre un 60 y un 70% es el nivel que permitirá decir que, aunque haya un brote, el mismo se propagará en menor medida y no provocará nuevos pacientes entre esa categoría de personas", dijo el experto en una entrevista al periódico Parlamentskaya Gazeta.
Briko destacó que resultaría erróneo esperar a que aumente de manera natural la cifra de personas inmunes al nuevo coronavirus, y la única manera de lograr ese objetivo por otra vía consiste en la vacunación masiva.
"La Organización Mundial de la Salud (OMS) considera preferible abarcar cerca del 95% de la población, una cifra que garantiza que la sociedad sea invulnerable a la infección", subrayó.